El transporte es la actividad con mayor demanda de energía en Andalucía. En la actualidad, supone el 38% del total de la energía consumida en los sectores finales de consumo (industria, transporte, servicios, agricultura, pesca y hogares) y es responsable del 63% de las emisiones de CO2 en dichos sectores. Los desplazamientos motorizados por carretera suponen más del 80% del consumo total del transporte, destinándose aproximadamente la mitad a vehículos ligeros utilizados para los desplazamientos de los ciudadanos.
Para reducir los efectos negativos del transporte en vehículo individual (gasto de combustible, contaminación, ruido, accidentes, etc.), es necesario atender a algunas recomendaciones como son: procurar desplazarse en bicicleta o a pie, usar el transporte público, compartir el vehículo con otras personas, conducir de una forma eficiente y utilizar combustibles alternativos como, por ejemplo, la electricidad, los biocombustibles, o el gas natural. De esta manera conseguirá: ahorrar combustible; reducir la contaminación; mejorar la seguridad vial; reducir el ruido y conseguir ciudades más confortables.
En el cambio del sistema de transporte hacia un transporte sostenible, es imprescindible reducir el uso del petróleo. Este aspecto es fundamental para disminuir la alta dependencia energética y los efectos ambientales y que sobre la salud provocan las emisiones de los derivados de los combustibles fósiles.
Hoy en día existe en el mercado una variedad de vehículos alimentados con fuentes de energía alternativas al uso de los combustibles convencionales (gasóleo y gasolina), que minimizan las emisiones de CO2. Son aquellos que usan energía eléctrica, biocombustibles, gas natural y gases licuados del petróleo (GLP).
Por lo que, al comprar un coche nuevo, hay que tener en cuenta el uso que se le va a dar al vehículo para elegir su potencia, además consultar la eficiencia energética del vehículo y decidir el combustible sostenible que mejor se ajuste al uso. Parte de esta información se puede encontrar en la etiqueta de calificación energética del vehículo.