En nuestro propio centro de trabajo también podemos conseguir ahorrar energía cambiando nuestros hábitos.
Con la calefacción y climatización
- En verano, 27°C es una temperatura adecuada. En invierno, entre 19°C y 21°C es suficiente.
- Coloca el termostato a 15°C si te vas a ausentar durante unas horas y desconecta la calefacción por la noche.
- En verano, utiliza ventiladores o el modo ventilación del aire acondicionado. En invierno, evita el uso de calefactores eléctricos.
- No coloques objetos encima de los radiadores que obstaculicen la difusión del aire.
- Adecua tu vestimenta a las circunstancias climatológicas.
- Evita abrir puertas y ventanas mientras el aire acondicionado o la calefacción esté funcionando.
- En horas de menor calor, aprovecha el aire exterior para ventilar la estancia y cierra puertas y ventanas en las horas centrales del día.
- Al llegar a una estancia, espera entre 5 y 10 minutos a que el cuerpo se aclimate antes de encender el aire acondicionado.
En la iluminación y ventilación
- Aprovecha la iluminación natural. Antes de encender una luz, piensa si es necesario.
- Apaga la luz cuando no sea necesaria en aseos, salas de reuniones, almacenes, despachos, etc.
- Adapta la iluminación a tus necesidades y reorganiza el mobiliario para aprovechar al máximo la luz natural.
- Usa lámparas de mayor eficiencia energética (led o fluorescentes de bajo consumo) y sistemas de regulación y control (detectores de presencia en aseos o garajes, balastos, etc.)
- Abre las ventanas y puertas para ventilar de forma natural. Recuerda que 10 minutos son suficientes.
- Desconecta los equipos de climatización al terminar la jornada laboral.
- En invierno, durante las horas centrales del día, procura subir las persianas o cualquier otro elemento de protección solar, bajándolos al anochecer.
- En verano, durante las horas de sol, baja las persianas o cualquier otro elemento de protección solar, subiéndolos al anochecer.
Con los equipos ofimáticos
- Apaga el ordenador cuando no lo utilices. O emplea el sistema inactivo o modo de hibernación.
- Desconecta la pantalla del ordenador para pausas cortas o bien configura el apagado automático del monitor.
- Apaga la impresora cuando no se use. Suele estar inactiva el 80% del tiempo que está encendida.
- Utiliza bases de conexión múltiple para conectar varios equipos ofimáticos. Al desconectarlas, apagarás todos los aparatos conectados a la vez.
- Desenchufa de la corriente los cargadores de baterías que no utilices.
- Selecciona en los equipos configuraciones en modo ahorro de energía.
Con el papel y generación de residuos
- Practica siempre las 3R: Reducir el consumo, Reutilizar y Reciclar.
- Antes de imprimir un documento, revisa los textos en el ordenador con “vista preliminar”.
- Utiliza sistemas de comunicación interna digital, como intranet o e-mail, así reducirás gastos de papel.
- Haz un uso racional de la impresora: imprime en blanco y negro, a doble cara y varias páginas por hoja.
- Utiliza papel reciclado y reutiliza el papel usado como bloc de notas.
- Aplica la recogida selectiva de todos los residuos que generas en el lugar de trabajo: papel, plástico, vidrios, fluorescentes, etc.
- En la impresora, utiliza cartucho de tinta o tóner reciclados, y agótalos al máximo.
En los desplazamientos al trabajo podrás ahorrar combustible y contribuir a reducir la contaminación siguiendo algunas recomendaciones.