

La Junta ha publicado hoy en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) la convocatoria de 109 millones de euros del programa FEDER 2021-2027 para que los sectores industriales estratégicos para Andalucía puedan solicitar incentivos que impulsen sus cadenas de valor mediante inversiones en competitividad industrial y en eficiencia energética. Las ayudas podrán alcanzar hasta el 80% en el caso de los proyectos de inversión o desarrollo de productos para la competitividad industrial y hasta el 65% en proyectos energéticos y la ventanilla para presentar las solicitudes se abrirá mañana.
Este nuevo programa, denominado “Cadenas de valor industrial”, se enmarca en la orden de Incentivos Integrados de competitividad y energía en Andalucía (INCEA), un nuevo instrumento con el que la Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Industria, Energía y Minas, pretende movilizar 1.000 millones de euros de inversión y generar 2.100 empleos. Se trata de la primera convocatoria de ayudas que reúne de forma conjunta incentivos para inversiones productivas y para la mejora energética de la industria.
En concreto, podrán solicitar las ayudas de este nuevo programa microempresas, pequeñas, medianas y grandes empresas de los sectores industriales que cuentan con uno de los 19 planes de cadena de valor CRECE Industria: la industria química; metalúrgica; de la madera y el mueble; farmacéutica; del textil, cuero y calzado; cementera; de la salud; del papel, cartón y artes gráficas; vidrio; joyería; agua; plástico sostenible; digitalización; automoción; metalmecánica; energía, frío y climatización; la industria para la edificación; el sector naval, y la piedra y mármol; junto a aquellas actividades encuadradas en la Estrategia Aeroespacial de Andalucía.
Los incentivos que hoy se convocan cuentan con dos líneas complementarias enfocadas a que las industrias puedan hacer crecer sus cadenas de valor a través de la realización en paralelo de inversiones productivas y de mejora energética.
Línea 1: ayudas al desarrollo competitivo
Los incentivos de la primera línea de ayudas, dirigida al desarrollo competitivo de las cadenas de valor industrial y gestionada por la Secretaría General de Industria y Minas, se tramitarán bajo el régimen de concurrencia competitiva, permitiendo así la selección de los proyectos con mejor impacto económico y social. Se podrán presentar solicitudes a esta convocatoria hasta el próximo del 31 de octubre.
Bajo el amparo de esta línea se ponen a disposición de la industria andaluza un total de 25,3 millones de euros en incentivos para la adquisición de activos materiales e inmateriales para la puesta en marcha de un nuevo establecimiento, la ampliación de la capacidad ya existente, la diversificación de la producción o la transformación del proceso de producción.
También se financia el desarrollo industrial y la apuesta por nuevos productos o procesos, apoyando actuaciones de investigación industrial y desarrollo experimental, así como la innovación en materia de procesos y organización. Además, se pretenden reforzar las capacidades y la especialización de las pymes y autónomos del ámbito industrial con la puesta a su disposición de ayudas para la contratación de servicios de consultoría.
En función de la tipología de actuación y beneficiario, los porcentajes de ayudas a la inversión para el desarrollo competitivo de la industria oscilan entre un 15% hasta un máximo del 80% (alcanzando el 100% para aquellas actuaciones que incorporen innovación en productos y procesos de pymes), siendo el incentivo medio entre el 50 y el 60%.
Los proyectos de inversiones productivas en nuevas o pymes existentes respaldados por la Línea 1 se deben complementar con una apuesta por la mejora energética a través de proyectos solicitados por la Línea 2.
Línea 2: ayudas al uso eficiente de la energía
La segunda línea de ayudas, enfocada al uso eficiente de la energía y dotada con 83,6 millones de euros de fondos FEDER, será tramitada por la Agencia Andaluza de la Energía bajo el régimen de concurrencia no competitiva, y permanecerá abierta hasta el 30 de septiembre de 2027 o hasta el agotamiento de los fondos.
En ella se contemplan ayudas para actuaciones que incrementen la eficiencia energética de edificios de uso industrial como la mejora de la envolvente térmica o la adquisición de equipos nuevos para las instalaciones de climatización, agua caliente sanitaria o iluminación.
También se recogen incentivos para mejorar la eficiencia energética en los procesos o instalaciones industriales tales como la renovación de los equipos y las tecnologías por otras de mayor eficiencia energética, la mejora en el diseño de los procesos o la implantación de sistemas de gestión energética mediante TIC.
Asimismo, son objeto de esta línea de ayudas las actuaciones que conlleven un incremento del uso de energías renovables en edificios, procesos e instalaciones de las industrias como la incorporación de instalaciones y equipos nuevos de energía solar térmica, biomasa, biolíquidos, biogás, biometano y otros gases renovables, así como instalaciones de autoconsumo eléctrico, fotovoltaico, con o sin almacenamiento.
Por último, se incentivan las llamadas tecnologías renovables próximas al mercado, para lo que se financiarán equipos consumidores de energía térmica o autoconsumo eléctrico con tecnología eólica, hidrotermia, marina, geotermia, aerotermia u otras tecnologías que no cuenten con una alta implantación en el mercado industrial andaluz, así como actuaciones de transformación de la biomasa para la producción de biocombustibles, biogás, biometano o gases renovables.
Para el caso de las actuaciones relacionadas con el uso eficiente de la energía, los porcentajes de ayudas a la inversión oscilan desde un 30% a un 65%, en función de la tipología de actuación y beneficiario, situándose el incentivo medio entre un 35% y un 45%.
Para facilitar el acceso a las ayudas, la presentación de solicitudes a cualquiera de estas dos líneas, independientemente del organismo que se encargue de su tramitación, se realizará a través de una dirección electrónica única ubicada en la página web de la Consejería de Industria, Energía y Minas.
Principales novedades: posibilidad de anticipos y pagos parciales y comprobación automática de requisitos
Para facilitar que cualquier empresa industrial, independientemente de su capacidad económica o tamaño, pueda acometer actuaciones que mejoren su competitividad y su eficiencia energética, el programa “Cadenas de valor industrial” de INCEA incorpora como principales novedades la posibilidad de un pago anticipado del 15% del incentivo una vez concedido, pudiendo ser el anticipo del 40% para las actuaciones acogidas a la línea de eficiencia energética si se presenta garantía otorgada por un banco, sociedad de garantía recíproca u otra entidad financiera. Además, también existe la opción de recibir un primer pago parcial de hasta un 50% tras la correspondiente justificación documental asociada a ese 50% de la inversión elegible.
Además, el programa se ha diseñado buscando la máxima simplificación administrativa posible. Así, se ha incorporado un elevado grado de automatización en los procesos con la comprobación automática de determinadas condiciones y requisitos necesarios para la concesión de las ayudas, como es el caso del código CNAE del solicitante o la ubicación de la actuación incentivable en la comunidad autónoma, para lo que se utilizará un mapa interactivo de Andalucía elaborado por el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía, con base en las referencias catastrales y coordenadas GPS. Se han habilitado consultas electrónicas sustitutivas de la aportación de determinados documentos, ahorrado así que sean los beneficiaros quienes tengan que acreditarlos.
Y, para la Línea 2 de uso eficiente de la energía, dado que a través de ella se tramitará un mayor volumen de expedientes, también se realizarán de manera automática determinados pasos del procedimiento como la comunicación al solicitante de la recepción de la solicitud o el informe de verificación de los requisitos y circunstancias requeridos para la concesión de los incentivos, lo que va a permitir reducir al máximo los tiempos de respuesta.